EL TESORO DE LA PATAGUA

 

 

 

Hace ya muchos años, un señor trabajaba de noche, cuidando una plantación de ajos; que estaba ubicada en la bajada del cerro Romeral, cerca del sector La Sombra. Una Noche se acurrucó con sus perros debajo de un árbol llamado Patagua y en medio del silencio de la noche escuchó un ruido muy fuerte, que parecía descender del cerro, como si todos los árboles y las piedras rodaran rompiéndolo todo. Al mirar espantado, vió un huaso aparecer desde los matorrales, vestido de negro y con unas espuelas que destellaban en la noche, como si saliera fuego de ellas: Los perros al ver a este hombre aullaban fuertemente y se metían entre las piernas del cuidador buscando refugio, este hombre era nada mas y nada menos que el diablo.

Su presencia solo significaba que le estaba ofreciendo un tesoro. Pero luego de mirarlo por varios minutos, en absoluto silencio sin emitir palabra alguna, el huaso tomó su caballo hacia la cumbre del cerro, quebrando árboles y saltando canales como si nada. El cuidador nunca mas pudo volver a ese lugar y en su reemplazo enviaron a otro cuidador. Se supo después, que ese hombre si sacó el tesoro, que consistía en dos cajones de onzas de oro que estaban debajo de la patagua. Ignorante del valor de las monedas, las vendió a muy bajo precio, y las personas que las compraron murieron mas tarde de forma trágica.